La expedición bética viaja hoy a Fráncfort convencido de la remontada
La RFEF cede parte de sus entradas para que unos 21.000 béticos asistan a La Cartuja
Si Manuel Pellegrini y sus hombres tienen los cinco sentidos puestos en el duelo de la Liga Europa ante el Eintracht, con un vestuario convencido de la remontada, los dirigentes béticos se reunieron ayer en Madrid con la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y el Valencia, con los preparativos de la final de la Copa del Rey como gran asunto del día. Es la realidad de este Betis que sigue vivo en las tres competiciones y que tiene abiertos esos frentes que generan ilusión en el aficionado.
En el plano deportivo, el Betis regresó ayer al trabajo tras el descanso del lunes con la novedad de la vuelta de Héctor Bellerín, ya recuperado de las molestias que le impidieron participar en los últimos duelos, y sin Sergio Canales, aunque el cántabro también formará parte de la expedición bética que viajará hoy hacia Fráncfort. El centrocampista continuó con su plan específico de trabajo por esa fisura en un dedo del pie izquierdo, pero su compromiso le hará de nuevo resistir al dolor para estar presente en una cita clave.
“Claro que se puede remontar. El equipo es consciente, no de ahora, sino desde hace mucho tiempo, de que vamos a ganar todos los partidos, en los estadios que sean. Ahora es ponerlo en práctica, ante un rival que sabe que el empate le vale. Atrás hay que estar muy concentrados, en cualquier detalle se puede decidir. Hay que hacer un partido excelente, Europa te exige eso, tanto ofensiva como defensivamente. Tenemos equipo y mentalidad para ir a ganar el partido”, aseguró ayer Bartra, expresando ese sentir del vestuario que quiere vivir otra noche histórica en Europa.
Esa necesidad de buscar una remontada para estar en el sorteo de los cuartos de final no será óbice para que Pellegrini mantenga sus rotaciones, con jugadores como William Carvalho, Aitor Ruibal o Joaquín que apuntan al once ante el Eintracht. También contará el técnico con Fekir, que hoy conocerá su sanción pero que se perderá seguro el duelo del domingo en Balaídos, por lo que saldrá a escena desde el inicio.
Reunión con la RFEF
Si el equipo bético aparca todo lo demás para centrarse en el Eintracht, los dirigentes béticos sí tuvieron ayer una mañana ajetreada en Madrid. La comitiva bética, encabezada por el presidente, Ángel Haro, se desplazó a la capital de España para la convocatoria realizada por la RFEF, que informó al Betis y al Valencia de todos los preparativos de la final.
El asunto capital era el reparto de las entradas y la buena voluntad del presidente de la RFEF, Luis Rubiales, permitirá que ambos clubes amplíen su cupo para la final de La Cartuja, ya que la Federación ya anunció ayer que renuncia a parte de la cuota que le correspondía por convenio. “De acuerdo con los estatutos federativos, el reparto corresponde a un tercio del aforo para organizador y para cada uno de los finalistas. Pese a ello, la RFEF ha ofrecido a los clubes la posibilidad de llegar al 40% de las entradas, cediendo la RFEF parte de su cupo. Los clubes han solicitado de la RFEF que exista la mayor paridad posible en la tipología de entradas y precio. Por ello, los clubes y la RFEF se han emplazado al próximo viernes, una vez reconfigurada la distribución del estadio para alcanzar el equilibro más adecuado para las aficiones”, indicó la RFEF en un comunicado.
De esta forma, y partiendo de un aforo de unas 52.000 localidades, al Betis le corresponderían unas 20.800 localidades, aunque la cifra final se conocerá el viernes, tras ese nuevo encuentro entre todas las partes. El precio de las entradas oscilará entre los 30 euros –con visibilidad reducida– y los 222 euros. Además, según informó la RFEF, cada club recibirá igualmente un paquete de entradas de diversidad funcional para sus seguidores.
No sólo el tema de las entradas centró la reunión de ayer, sino que también se confirmó que el Betis, el equipo de mayor antigüedad, actuará como local, con lo que vestirá camiseta verdiblanca y calzonas negras, como ha elegido el propio club bético, que realizará una indumentaria especia para la final. Mientras, el Valencia, por su parte, vestirá íntegramente de blanco y llevará el escudo en la camiseta, que no lo portaba en la equipación de la Copa esta temporada. Además, los aficionados verdiblancos se ubicarán en el Fondo Sur de La Cartuja, mientras que los del Valencia estarán en el Fondo Norte.
La RFEF también informó que el día previo a la final se llevarán a cabo los entrenamientos oficiales en el escenario del partido, en las bandas horarias de las 18:00 y las 20:00, y será el Betis, por ser el local, el que elegirá horario en primer lugar.
Además, la RFEF también indicó que la final será retransmitida en directo en más de 160 países y será la más seguida de la historia a nivel internacional, ya que nunca antes se había ofrecido una final de Copa en semejante número de países.
Fuente: Diario de Sevilla