Ha caído desde una altura de casi cien metros desde un acantilado próximo a las playas Nueva y de Los Guirres
Finalmente, se cumplieron los peores presagios y el río de lava desembocó en el mar, cayendo desde una altura de casi cien metros desde un acantilado próximo a las playas Nueva y de Los Guirres, confirmaron anoche tanto el Ministerio de Transportes como el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan).
Los expertos habían manifestado su inquietud desde hace varios días, cuando se reactivó de nuevo el volcán de Cumbre Vieja, y una nueva colada se desvió hacia el oeste y a mayor velocidad que la lava expulsada en los primeros días, de que llegase al mar. Se espera que este hecho genere explosiones, olas de agua hirviendo o incluso nubes tóxicas.
La televisión regional de Canarias informó, nada más producirse el suceso que, de momento, solo se ha producido una gran columna de humo negro en la zona en que la lava cayó al océano. La colada que ha alcanzado el mar es la sur, que venía rodeando la montaña de Todoque por su vertiente más alejada de Tazacorte.
El Centro coordinador de emergencias de Canarias (112) incidió en que ahora que «la lava ya ha llegado al mar» todo aquel que esté cerca deberá, «si se encuentra en el exterior», buscar «un lugar seguro» donde refugiarse. Las autoridades recomiendan permanecer al menos a 3,5 kilómetros de la zona y advierten que se forman nubes blancas de vapor de agua pero también gases nocivos para la salud.
Columna de 50 metros de altura
El grupo de geociencias marinas del Instituto Español de Oceanografía, que está siguiendo en directo el avance de las lavas, ha detallado que «se está generando un impresionante depósito de más de 50 metros de altura» en menos de 45 minutos, que además sigue creciendo.
Según la página del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), el contacto podría generar explosiones, olas de agua hirviendo o incluso nubes tóxicas.
«La inhalación o el contacto con gases ácidos y líquidos puede irritar la piel, los ojos y el aparato respiratorio y causar dificultades al respirar», advirtió el Involcan.
En prevención, los vecinos de las zonas más cercanas habían sido confinados desde el lunes para evitar el contacto con posibles gases tóxicos.
Las viviendas «ahora mismo están a dos kilómetros, hay seguridad suficiente, no creo que lleguen los gases a esos barrios», afirmó a la televisión canaria Juan Miguel Rodríguez, alcalde de Tazacorte, el municipio donde la colada alcanzó el mar.
«La lava ya ha llegado al mar. Si te encuentras en el exterior, busca un lugar seguro donde refugiarte», pidieron los servicios de emergencia de Canarias en Twitter.
Fuente: ABC