- La asociación de hosteleros confía en que la programación del Consejo de Hermandades para la Semana Santa alivie las pérdidas
- Prevén una caída del 70% en la facturación de Nochevieja
Otro duro mazazo para el sector de la hostelería sevillana. Los bares de la capital andaluza dan por perdido el 50% de la facturación de 2021 tras decretar el arzobispo la suspensión de las cofradías el próximo año por la pandemia del Covid. Será la segunda Semana Santa consecutiva sin cortejos procesionales en la ciudad, una época que, según ha referido el presidente de la asociación que representa a este sector, Antonio Luque, supone la mitad de los ingresos del ejercicio económico.
Una pérdida que será especialmente negativa en los bares del Casco Antiguo, por donde transitan todas las cofradías. Luque ha recordado que la Semana Santa supone una recuperación en las ventas de estos establecimientos tras los meses de enero y febrero que suelen ser bastante “flojos”, una vez pasadas las fiestas navideñas. “El próximo año serán terroríficos”, apunta el presidente de los hosteleros.
La primavera, por tanto, suponía una importante recuperación que en 2021 no llegará y dejará las arcas de los bares, restaurantes y cafeterías bastante mermadas respecto a lo que se recaudaba otros ejercicios. A la suspensión de la Feria de Abril se ha sumado este martes el decreto de monseñor Asenjo que, como ya adelantaron las autoridades sanitarias hace unas semanas, suspende las cofradías ante la improbabilidad de que la evolución de la pandemia permita para entonces la celebración de actos de afluencia masiva.
Dos Semanas Santas sin procesiones
“Son dos Semanas Santas seguidas sin procesiones, una época en la que realizamos el 50% de la facturación del año”, ha referido Luque, quien, no obstante, ha anunciado que la asociación que preside ya se ha puesto en contacto con el Consejo de Cofradías con el propósito de que este colectivo sea partícipe del programa de actos alternativo que desde la institución se diseñe en esas fechas. “Habrá que reinventarse en esa época, pues nos hace falta un balón de oxígeno que evite el cierre de más negocios y la pérdida de empleos en el sector”, ha añadido este empresario.
Un programa del que sólo se conoce el avance que realizó el Consejo el pasado otoño y con el que se intenta que la próxima cuaresma y Semana Santa no pase totalmente en blanco en Sevilla, como ha ocurrido en 2020, cuando la pandemia irrumpió en mitad de las vísperas. Por ahora, lo que más ha trascendido es la intención de realizar un acto que sustituya al Pregón del Domingo de Pasión, para lo que se elegiría un escenario nuevo: el auditorio de Fibes.
Queda por conocer -algo que se sabrá según evolucione la situación sanitaria- los actos y cultos a celebrar por la institución que preside Francisco Vélez y los que organicen las hermandades en los templos a título personal y siembre de acuerdo con el Arzobispado. En este aspecto es donde más tienen puestas las esperanzas el sector hostelero que, aunque no logren los ingresos de años anteriores, sí podrán evitar que la caja se quede a cero.
Bajas expectativas para fin de año
Por otro lado, el vicepresidente de esta asociación, Pedro Robles, ha apuntado quela caída de la facturación para la próxima Nochevieja será del 70%. A este respecto, ha explicado que todos los años se dobla turno para dicha jornada. El primero comienza a las 20:00 y el segundo, a las 22:30. Una situación que obedecía la la libertad de movimientos y de reunión que existía y que actualmente se encuentran restringidas por el Covid. Limitaciones que impiden la llegada de turistas que llenaban los negocios hosteleros estas fechas.
De esta forma, según Robles, se ha pasado del lleno total para despedir al año a un máximo de 10 o 15 reservas, lo que también hará disminuir los ingresos de las próximas jornadas. En este punto, el vicepresidente de la asociación abunda en que son pocas las personas que estarán por la noche en los bares, ante “el escaso margen de celebración después de tomarse las uvas, con un toque queda a la 1:30”.
La presión ejercida por los hosteleros en fechas recientes obligó a la Junta de Andalucía a cambiar las restricciones iniciales para las fiestas navideñas, que contemplaban el cierre de estos negocios de 18:00 a 20:00. Finalmente, sí se permite la apertura en esta franja horaria, aunque, eso sí, sin servir alcohol.
Fuente: Diario de Sevilla