La provincia acoge un ramillete de monumentos y actividades al aire libre que son una opción a este fin de semana ante el éxodo masivo hacia las costas
La fase tres de la desescalada por el Covid-19 permite la movilidad interprovincial, y eso en Sevilla cuando se acerca esta fecha es sinónimo de playa. Desde que se decretara el estado de alarma, los sevillanos han permanecido en su provincia aguardando a que llegara esta nueva fase de la «nueva normalidad», al permitirse el desplazamiento familiar en los vehículos para regresar a las costas gaditana y onubense, principalmente, como vía de escape después de tanto tiempo confinados.
Ante un previsible éxodo masivo de los sevillanos buscando la brisa marinera, este fin de semana puede suponer el regreso de los atascos en carreteras como la A-49 o la AP4, antigua autopista de peaje, ya liberada. Pero para los que opten por permanecer en sus casas, la provincia de Sevilla esconde una serie de monumentos patrimoniales dignos de ser visitados o simplemente, disfrutar de la naturaleza y las actividades que ofrece el ocio deportivo.
A continuación, y teniendo en cuenta de que no todos los monumentos permiten su visita por ahora, ABC ofrece varias recomendaciones de las que disfrutar sin necesidad de desplazarse a otras provincias.
Carmona, ciudad patrimonial
En la Campiña sevillana existen varios pueblos que deben ser visitados, al menos, una vez en la vida porque son un crisol de varias épocas. Uno de ellos es Carmona, situado a unos treinta kilómetros de la capital. La desescalada ha posibilitado que sus principales monumentos reabran al público.
Así, desde el 1 de junio el primero de los monumentos en abrir ha sido el Alcázar de la Puerta de Sevilla, uno de los edificios históricos más visitados de la localidad y uno de los accesos principales al conjunto monumental de Carmona. Para ello, se han tomado todas las medidas higiénicas y de prevención para garantizar la seguridad de los trabajadores y de los turistas que accedan al Alcázar.
Desde el pasado viernes, el Museo de la Ciudad ya está abierto y está previsto que entre el lunes o martes próximos pueda abrir la Necrópolis. En coordinación con las parroquias y conventos de la localidad, el objetivo de la delegación municipal de Turismo de esta localidad es la reapertura del resto de monumentos de manera progresiva durante las próximas semanas.
Otra manera de disfrutar de Carmona es a través de códigos QR. Se trata del acceso a tres rutas de Carmona mediante Google My Maps: Ruta de la Cueva de la Batida, Ruta Carmona de Cine y Ruta de los Pilares. Con los hashtag #CarmonaTeEspera #CarmonaNaturalmente y #CarmonaEsDeCine, la Oficina de Turismo está compartiendo a través de las redes sociales estas tres rutas. Al acceder a ellas a través de un dispositivo móvil, se obtiene toda la información e imágenes de los distintos puntos de interés así como las indicaciones para realizar los recorridos propuestos a pie o en bicicleta. El acceso se realiza simplemente escaneando los códigos QR que aparecen en cada uno de los folletos.
Otra ciudad que merece la pena pasar una jornada en ella es Osuna, distante de la capital en unos 80 kilómetros. Si bien la desescalada en cuanto a la apertura de los principales monumentos no es posible, sí se puede disfrutar de los monumentos desde el exterior de los mismos, como puede ser la impresionante Colegiata, cuya torre acaba de ser restaurada hace una semana y ya es posible observarla en su conjunto.
Lo que sí está abierto es El Coto Las Canteras, más conocido como la «Petra de la Campiña», un escenario impresionante que se levanta en el término municipal ursaonense. Se trata de un conjunto arqueológico que se puede visitar, previa cita telefónica al 657 800 566, de martes a viernes, de 10 a 13 horas y los sábados, domingos y festivos de 10 a 14 horas, según anuncia el Ayuntamiento.
Écija
Siguiendo la ruta por la provincia, una tercera sugerencia nos lleva hasta Écija, donde ya está abierto el Museo y el propio Palacio de Benamejí (747 867 202), que es visitable además de albergar las salas del Museo en sí. Una opción para todos los que se acerquen hasta esta bella ciudad, conocida como «la de las once torres» es subir al torreón y disfrutar de las caballerizas. Un paseo por sus calles se hace imprescindible, habida cuenta de que las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología para este fin de semana no dejan unas temperaturas tan altas para la fecha en la que nos encontramos.
Turismo activo
Para aquellos que se decanten por realizar actividades al aire libre relacionadas con el ocio o el deporte, la provincia deja además varias opciones de disfrute, desde visitas a parques de animales hasta un paseo por la Ribera del Huéznar, eso sí respetando las medidas de seguridad y siendo respetuosos con el medio ambiente.
Así, para los amantes de los animales, una opción es realizar una vista a la Reserva de El Castillo de las Guardas (955 952 568) —situado a unos 50 kilómetros de la capital—, que abrió sus puertas el pasado miércoles tras el confinamiento. Con mascarillas, con una reducción al 50% de su aforo máximo, y manteniendo la distancia de seguridad, el visitante puede disfrutar de un largo recorrido por sus instalaciones.
Un paseo por la naturaleza a lo largo de los rincones más naturales de la Sierra Morena es otra opción si se quiere disfrutar de un maravilloso paisaje. La Ribera del Huéznar es accesible desde varios municipios, como San Nicolás del Puerto o desde Cazalla de la Sierra, si bien hay que recordar que el pasado fin de semana hubo mucha polémica porque los visitantes, ante la falta de contenedores en los diferentes merenderos, dejaron tirados los restos de comidas y bolsas.
Ruta en bicicleta por la Vía Verde
Para los amantes a las dos ruedas existe una ruta que hay que realizarla, al menos una vez en la vida. Discurre entre las provincias de Sevilla y Málaga, teniendo su salida o meta en Puerto Serrano u Olvera. Entre ambas localidades gaditanas se pasa por el término municipal de Coripe, donde se puede atisbar una de las mayores colonias de buitres leonados sobre el Peñón de Zaframagón y acercarse hasta este pueblo sevillano en busca del Chaparro de la Vega, un ejemplar de encina de más de dos siglos de vida y de grandes dimensiones (13 m de altura y 30 de diámetro), que puede servir para tomarnos algo antes de continuar hasta la meta.
Durante el paseo en bicicleta por esta ruta se atraviesan varios túneles —el más largo de 900 metros— por el que nunca pasaron los ferrocariles. Eso sí, hay que comprobar que antes de iniciar la ruta las luces funcionen.
Fuente: ABC